EFE
- «Parar, caer y rodar», dice el lema ante posibles accidentes con hogueras, velas o fuegos artificiales.
El cuerpo de bomberos de Dublín, en Irlanda, ha lanzado una nueva recomendación para la ciudadanía ante un accidente con hogueras, velas o fuegos de artificio durante las fiestas de Halloween: «hacer un Neymar». Se trata de un simpático guiño a la exageración del futbolista brasileño cuando recibe una falta.
«Parar, caer y rodar», dice el lema. Este remedio -dicen- sería válido para sofocar las llamas que pueden prender en «disfraces o ropas» ante la falta de procedimientos más comunes.
El consejo, lanzado en la cuenta de Twitter @DubFireBrigade, está acompañado por un gif a cámara lenta del diez de la selección brasileña en el que, después de una entrada de un rival, cae y rueda en el césped, entre muecas de dolor.
«Para, cae y rueda»
Si te encuentras en una situación en la que tu disfraz o ropas están en llamas haz un #Neymar. Correr solo avivará las llamas y propagará el fuego», escribieron los bomberos.
STOP, DROP & ROLL. If you find yourself in a position where your costume, or clothes, catch fire do the #Neymar. Running will only fan the flames and help the fire spread. STOPPING, DROPPING & ROLLING will smother the flames. pic.twitter.com/SjgdPOT3Pe
— Dublin Fire Brigade (@DubFireBrigade) 30 de octubre de 2018
La fama de «piscinero» del exjugador del F.C. Barcelona, ahora en Paris Saint Germanin, se acrecentó durante el Mundial disputado en Rusia el pasado verano, con memes y gifs que se han convertido en virales en las redes sociales.
El peligro de los fuegos artificiales
Aunque los fuegos artificiales están prohibidos en este país, los servicios de emergencia atienden cada año en la terrorífica noche del 31 de octubre cientos de llamadas de accidentes con fuego.
Siguiendo la temática de Halloween, los bomberos también han recomendado a los dublineses que recurran a la ayuda de «pequeños fantasmas y duendes» para comprobar en casa el funcionamiento de las alarmas de incendios y detectores de gases mortales, como el monóxido de carbono.