CARLES RULL
- La mítica película de Ridley Scott se estrenó en los cines norteamericanos a finales de mayo de 1979.
- H.R. Giger diseño el famoso xenomorfo, y Sigourney Weaver convertiría a Ripley en un icono del cine de acción.
- LISTA: Vota cuál de las películas de Alien es tu favorita.
Un simple huevo de gallina. Esta fue la primera imagen inquietante que pudieron ver los espectadores, hace 40 años, de la película de ciencia-ficción y terror Alien. Aparecía en el póster de la película y en el primer tráiler porque el diseño de los recipientes definitivos que se hallarían en la luna LV-426 aún no estaban terminados.
Al huevo le seguían imágenes angustiantes, solo sonidos y sin diálogos, y sin mostrar nunca a la amenaza que torturaba a sus protagonistas. Siete tripulantes de una nave, la Nostromo, en una misión espacial de transporte de carga minera hacia la Tierra, más un gato. Para ver al otro aterrador pasajero, el octavo según una coletilla del título original, habría que esperar a la película. El tráiler acababa con una frase que también se ha hecho mítica: «En el espacio nadie puede oír tus gritos».
La nave Nostromo, un espacio cerrado y oscuro que bien podría ser también el de una sala de cine, según debería pensar Barbara Gips, la redactora de publicidad a la que se le ocurrió el leiv motiv. El caso es que Alien llegó a un número limitado de salas comerciales de Estados Unidos el 25 de mayo de 1979.
A partir del 22 de junio pasó a exhibirse en un gran número de cines, y en España se estrenaría el 25 de septiembre. El resto es historia, un título mítico y de referencia.
El guion original era obra de Dan O’Bannon y Ronald Shusett. Juntos habían sido guionistas de Dark Star, una producción de bajo presupuesto de John Carpenter, y presentaron su nueva creación a diversos estudios vendiéndola como «Tiburón, pero en el espacio». Por entonces pocos o nadie confiaban en la viabilidad económica de una película de ciencia-ficción, hasta que Star Wars entró en escena y arrasó en taquilla en 1977.
Y al igual que la legendaria película de George Lucas, fue 20th Century Fox la que aceptó llevarla adelante con un presupuesto limitado, pero que acabaría hinchándose de los pocos más de cuatro millones de dólares a casi once. Al contrario que el destino de la mayoría de pasajeros de la Nostromo, la fortuna les sonrió.
Solo en Estados Unidos y Canadá recaudó 80,9 millones de dólares (286,3 millones ajustados a la inflación), la cuarta más taquillera aquel año en la que la gran triunfadora sería Kramer vs. Kramer (con 106,3 millones), y ganaría el Oscar a los mejores efectos visuales.
Fue además el feliz resultado de la inspiración de varios de los integrantes del equipo artístico y creativo, como un joven y entusiasta director británico que hasta ese momento solo había dirigido un largometraje, Los duelistas (1977). Ese cineasta era Ridley Scott, que tres años después estrenaría otra obra maestra de la ciencia-ficción, Blade Runner.
En cuanto al aspecto del xenomorfo, el monstruo que se infiltraba en la Nostromo, también fue una idea de Ridley Scott. Le sedujo una litografía del artista gráfico y escultor suizo H.R. Giger titulada Necronom IV, y decidió que había que contratarle para que alumbrara una criatura similar para la terrorífica propuesta.
H.R. Giger se implicó a fondo y creó parte de los escenarios, también el famoso esqueleto petrificado del Space Jockey y otros de los repelentes bichos como el «facehugger» (el parásito que se pegaba a la cara de sus víctimas para engendrar), el «chestburster» (el «recién nacido» que se abría paso reventando los pechos de sus huéspedes) y, claro, los citados huevos. Todo regado con unas referencias sexuales que no daban lugar a sutilezas.
Por si todo no era lo suficientemente aterrador, el compositor Jerry Goldsmith se encargó de darle una atmosfera musical aún más siniestra. Pero el destino de lo que daría lugar a una saga podría haber sido muy distinto si Ridley Scott hubiera logrado rodar e incluir uno de los finales que tenía previsto.
Era el del xenomorfo arrancándole la cabeza a la teniente Ripley (Sigourney Weaver). Se colocaría su trofeo como casco y pondría rumbo a la Tierra imitando la voz de su víctima humana. Un final que nos habría privado de seguir contando con Ripley en las posteriores secuelas.
La teniente Ripley pudo ser… Meryl Streep
El guion original no especificaba el sexo de sus personajes. Sin embargo el mayor protagonismo acabó recayendo en la teniente Ripley. Un personaje que fue ofrecido a la que por entonces aún era una joven y prometedora actriz, Meryl Streep. Pero en esos momentos estaba demasiado afectada por la muerte de su pareja, el también actor John Cazale, y declinó el papel. Fue entonces cuando se recurrió a la segunda opción, Sigourney Weaver.
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Sigourney interpretó a Ripley en cuatro ocasiones y se convertiría en la primera de las grandes heroínas del cine de acción y ciencia-ficción (aunque había precedentes, como la Barbarella de Jane Fonda en los 60). Un reconocimiento que le acarrearía una nominación al Oscar en la secuela Aliens, el regreso (1986) dirigida por James Cameron. La tetralogía se completaría con Alien 3 (1992) y Alien: Resurrección (1997).
Ripley a parte, el guion también había tramado un diabólico plan para sus personajes: éstos irían muriendo en función de la popularidad de sus intérpretes, John Hurt y Tom Skerrit entre ellos.
Secuelas, precuelas y nueva película
El propio Ridley Scott dirigió dos precuelas, Prometheus (2012) y Alien: Covenant (2017), como complemento a la tetralogía anterior, pero sin alcanzar la repercusión de las dos primeras. Además se llegaron a realizar dos crossovers de bajo presupuesto, Alien vs. Predator (2004) y Alien vs. Predator: Requiem (2007).
Para conmemorar los 40 años del estreno, se organizó un concurso de cortos relacionados con el universo Alien, los seis seleccionados se pueden visionar en la web AlienUniverse.com. También se ha anunciado una nueva serie para Hulu (una plataforma de streaming propiedad de Disney) con Ridley Scott ejerciendo como productor.
Y todavía se habla de realizar una quinta película. Un proyecto cancelado que dirigiría Neill Blomkamp (el director de District 9) y produciría James Cameron, con la idea de pasar página con lo sucedido en Alien 3 y Alien: Resurrección. Sería una secuela directa de Aliens de 1986.
(Imágenes texto de ‘Alien’ ©20th Century Fox )