La más reciente película de Sandra Bullock, Bird Box, representó un gran éxito para la plataforma Netflix y ahora ha cambiando la vida de toda una comunidad.
La residencia de Monrovia, ubicada a 32 km al noreste de Los Ángeles, donde filmaron escenas de la cinta, se ha convertido en un destino obligado para los amantes del largometraje y decenas de fanáticos visitan a diario el lugar.
“Todos los días vienen personas a sacarse fotos con la casa, hasta en Navidad, desde el 13 de diciembre que se estrenó la película, todos los que han venido a sacarse una foto han sido muy amables, algunos incluso tocan primero la puerta para pedir permiso”. Asegura la dueña, que según versiones del portal TMZ, recibió 12 millones de dólares por el uso de la residencia durante el desarrollo de la trama.
Hasta el momento se sabe que más de 45 millones de personas han visto la película y que ha sido el mayor éxito en los últimos 12 años de la compañía, incluso comparativamente, se dice que de haberse estrenado en cines, habría recaudado más dinero que “Aquaman” que al momento ha logrado 629 millones de dólares de ingresos a nivel mundial.