Este jueves la cuenta de Twitter de Pantomina Full, un dúo cómico dedicado a crear vídeos de humor virales, ha sido supuestamente hackeada. Los delincuentes que se han hecho con el control de la cuenta la están utilizando para amenazar a líderes políticos como Pablo Casado o Santiago Abascal.Sin embargo, no solo las cuentas de personalidades o famosos pueden sufrir este tipo de ataque. Los usuarios particulares también estamos expuestos a hackeos y usurpaciones de identidad. Informarnos, entretenernos, conectar con amigos y familiares… Hoy en día, el uso de Internet y las redes sociales conviven con nosotros de forma íntegra, lo que no quiere decir que estemos protegidos, todo lo contrario. «Los usuarios estamos completamente desprotegidos», asegura María Luisa Bautista, la abogada y directora de María Luisa Bautista Abogados. «Lo primero que sería necesario es que la Agencia Española de Protección de Datos y el Supervisor Europeo de Protección de Datos blindasen mucho más la privacidad de los usuarios«, afirma. Desde su web, recomiendan utilizar diferentes contraseñas para cada sitio web, que estas tengan una dificultad y longitud suficientes y no facilitar datos a sitios que no posean el certificado de seguridad. Además, hay que mantener el antivirus actualizado, no realizar operaciones financieras en Internet y no responder a ofertas comerciales que no hayan sido solicitadas con anterioridad. Como medida de protección, también se puede denunciar a través de las propias redes sociales como Facebook antes de que el problema vaya a mayores. Si algún usuario identifica una cuenta falsa, una usurpación de identidad o la imposibilidad de acceder a una cuenta, tiene la posibilidad de avisar a través del perfil del usuario.Primero, se selecciona el perfil a denunciar. En las opciones, hay que marcar «buscar ayuda o denunciar perfil» y, por último, elegir la opción que se adecue a la situación para que se proceda a eliminar la cuenta fraudulenta. Sin embargo, aún tomando estas medidas de seguridad, María Luisa asegura: «Los tribunales españoles no nos protegen, y mucho menos los europeos». Afirma que es necesario un cambio de leyes, ya que «la tecnología avanza mucho más rápido que la legislación». En caso de que un usuario detecte que ha sido víctima de un hackeo en alguna de sus cuentas, «lo primero que hay que hacer es poner una denuncia en el juzgado de guardia para que las fuerzas de seguridad puedan, de alguna manera, seguir el rastro de las personas que han accedido a la cuenta», explica la abogada. Sin embargo, añade que esta labor «es muy difícil», ya que las plataformas están «absolutamente blindadas». De este modo, hay veces que no es posible dar con el ciberdelincuente. Junto con esta denuncia, hay que «aportar evidencias de que la cuenta ha sido hackeada«, añade Javier Prenafeta, abogado especializado en Derecho tecnológico y socio en el despacho 451.legal. Esta información la puede ofrecer la propia red social como Twitter: «Puede certificar que la contraseña se ha cambiado o desde que direcciones IP se está accediendo al perfil», asegura. Además de la denuncia, una vez que se tiene información sobre el alcance que tiene el caso, es necesario «hacer una notificación a la agencia tributaria”, explica Javier Prenafeta. Sin embargo, el abogado cree que poca gente reclama estas situaciones: “Esto ha pasado otras veces y no ha trascendido de ahí”. De este modo, una vez que hemos recuperado la cuenta: «Lo más práctico es dar una explicación de lo que ha pasado y pedir disculpas».