20MINUTOS.ES / VÍDEO: AGENCIA ATLAS
Connor había recibido tales malos tratos que una de sus patas delanteros quedó muy dañada. Tanto, que hubo que amputársela. María lo adoptó y, tras entrenarlo, decidió utilizarlo en su profesión: es maestra y pensó que el perro podía ayudar a algunos de sus alumnos.
El perro se ha convertido en un profesor asistente de María en las clases que esta maestra gallega da a niños con problemas de timidez o de lectura.
Según María, el perro ayuda a que los niños se desinhiban ya que no se sienten juzgados. Además, para el perro también es positivo, ya que sus ‘alumnos’ no escatiman en mimos.